La característica más peculiar de la sala de ensayo es la formación curvilínea de los techos, esta forma tan característica hace que las ondas sonoras vayan incidiendo sobre él en mayor medida, lo que conseguirá un menor ruido, formando así un ambiente idóneo para la práctica de la música.
En esta misma planta además se ubican espacios para el desarrollo de tareas administrativas, dos despachos, una sala de juntas y salas de archivo.
La segunda planta está dedicada a funciones docentes, la distribución de las aulas se ha planteado desde las más modernas líneas pedagógicas evitando así el concepto entre cuatro paredes, sentados en un pupitre, escuchando infinitos discursos de profesores. Se ha optado por la enseñanza individualizada apostando por un espacio que fomente la experiencia vital y la cohesión entre los diferentes aspectos que se consideren relevantes para el aprendizaje y para la formación humana.
Estas aulas han sido tratadas con materiales de absorción acústica más modernos que existen en el mercado actualmente.
El edificio Casa de la Música, es una edificación comprometida con la accesibilidad a todos los lugares, la planta baja queda ligeramente elevada sobre la rasante y se accede a ella mediante rampa, lo que permite así una buena accesibilidad a la zona de vestíbulo y recepción. Así mismo el edificio consta de un ascensor que comunica todas las plantas salvando todos los obstáculos, además cuenta con servicios sanitarios en todos los niveles.
Para el interior de la Casa de la Música se han utilizado 500 metros cuadrados de terrazo , granito y 425 cuadrados de pavimento flotante con lamas de madera de haya colocados en todas las estancias, además de una climatización individualizada en cada una de las salas.